Vacuna Tdap (Tétanos, Difteria, Tosferina)

Tétanos (también conocido como “mandíbula rígida”) es una infección causada por una bacteria que vive en el ambiente, como en el suelo o el estiércol. Se transmite por heridas punzantes, quemaduras graves o fracturas expuestas. Provoca espasmos y rigidez muscular que pueden dificultar la respiración.

Difteria es una infección bacteriana grave que se transmite entre personas, por ejemplo al toser o estornudar. La bacteria produce una toxina que mata tejido sano y afecta principalmente el sistema respiratorio o la piel. La difteria respiratoria causa dolor de garganta, inflamación de ganglios y debilidad. La difteria cutánea genera llagas abiertas.

Tosferina (o pertussis, también conocida como “tos de los 100 días”) es una infección bacteriana que provoca tos intensa y persistente, junto con dificultad para respirar. Puede afectar a cualquier persona, pero es muy peligrosa (incluso mortal) para bebés menores de un año.

Tétanos: puede provocar fracturas óseas, coágulos que bloquean arterias en los pulmones y neumonía. El tratamiento es complicado y puede durar mucho. Entre el 10% y el 20 por ciento de los afectados fallece.

Difteria: si la toxina llega al torrente sanguíneo, puede causar daños al corazón, nervios y riñones, además de parálisis. Sin tratamiento, el 50 por ciento de los casos respiratorios muere; con tratamiento, muere el 10 por ciento.

Tosferina: afecta especialmente a los bebés. El 50 por ciento necesita hospitalización, el 25 por ciento desarrolla neumonía y el 60 por ciento tiene pausas respiratorias. Aproximadamente 1 de cada 100 bebés muere.

La Tdap protege eficazmente contra las tres enfermedades:

• Tétanos: protege casi al 100 por ciento durante unos 10 años
• Difteria: 95 por ciento de efectividad durante 10 años
• Tosferina: 70 por ciento de efectividad el primer año; baja de 30 a 40 por ciento después de 4 años. En mujeres embarazadas, protege a más del 75 por ciento de los bebés menores de 2 meses.

En los años 50, el tétanos causaba 1,000 casos por año y casi la mitad eran fatales. Hoy solo se registran unas pocas docenas.

Antes de las vacunas, la difteria era una de las principales causas de muerte infantil.

Antes de la vacuna contra la tosferina (en 1940), había 200,000 casos al año y 9,000 muertes. Hoy, unos pocos casos al año, y 9 de cada 10 bebés afectados necesitan hospitalización.

La Tdap es muy segura. Puede causar efectos secundarios, pero suelen ser leves y pasajeros:

• Dolor, enrojecimiento o hinchazón en el lugar de la inyección
• Fiebre leve
• Dolor de cabeza
• Cansancio
• Náuseas, vómitos, diarrea o dolor estomacal

Efectos graves (muy raros):
• Reacciones alérgicas (menos de 1 por millón de dosis)
• Síntomas: ronchas, hinchazón en cara o garganta, dificultad para respirar, ritmo cardíaco acelerado
• Ocurren entre minutos y pocas horas después de la vacunación

La Tdap se aplica entre los 7 y 19 años si el niño no completó el esquema de TDaP

Los adultos deben recibir refuerzo de Tdap o Td cada 10 años, o después de 5 años si tienen una herida grave o quemadura

Hay varias vacunas con componentes similares, cada una recomendada para diferentes edades:
Consulta con tu doctor para elegir la vacuna más adecuada para tu hijo o familia.